Otras cifras sobre los libros en México

Ya se ha demostrado que a los mexicanos orgullosamente les encanta pertenecer al país más ignorante del planeta… y lo peor: que sus argumentos para no leer se basan en pendejadas como “no tengo tiempo”, “no me interesa” y “no tengo dinero”… como quien dice: la peor combinación de los NO…

En este contexto vale la pena recordar, por ejemplo, que de acuerdo a las últimas cifras difundidas por los especialistas Finlandia ocupa el primer lugar a nivel mundial con 47 libros leídos al año por persona, mientras que el 85 por ciento de los mexicanos vergonzosamente no llegan a leer un libro completo al año…

Pero en este desangelado contexto también surgen algunas inquietudes que vale la pena analizar: qué hay detrás de un libro como objeto de consumo?… y en consecuencia qué sucede con los sus respectivos autores?... bien, pues esto también proporciona interesantes cifras...

La reciente celebración anual del día del libro el pasado mes de abril este 2013, ha permitido conocer información que fácil puede provocar que a más de uno se le erice el cabello por aquello de la terrorífica realidad en la que vive el promedio de los escritores…

Veamos las siguientes cifras* relacionadas con lo que hay detrás de la edición de un libro em mexiquito, en términos de inversión total de dinero, antes de ser publicado:

- el 12% corresponden a los costos de producción
- se asigna el 2% a la edición
- pertenece al autor el 10% del precio en etiqueta de un libro
- el 7% se invierte en la administración de la editorial
- se reparte el 53% entre el distribuidor y vendedor
- se canaliza el 3% a publicidad y presentaciones
- la utilidad de la editorial es del 13%
- las librerías pagan a los 90 días después de haber vendidos los libros

Lo peor de todo es que estos datos pueden verse afectados por la devolución de libros no vendidos, en cuyo caso la pérdida la asume al 100 por ciento la propia editorial…

Pero hablemos de números usando un ejemplo: en mexiquito el tiraje promedio de un libro es de patéticos e humillantes 2,000 ejemplares (hay quienes afirman que ha bajado a 1,500… e incluso a los 1,200)… y si el precio promedio es de $ 150.00, el total de ganancia bruta es de 300,000.00… de estos el autor recibirá $ 30,000.00 que sólo podrá cobrar si se venden más del 40% de las unidades, mientras que la editorial tendría de ganancia neta unos $ 39,000.00 pesos…

Y es en este sentido que la mayoría de las editoriales apuestan al mismo tiempo por la publicación de literatura formal y por la edición de los mal llamados best-seller, los cuales para que sean rentables deben tener ventas de alrededor de 50,000 ejemplares, situación que enfrenta dos grandes desventajas, al menos en este país:

1) se considera una especie de “milagro” que haya autores que alcancen estos niveles de venta, y si bien en México 50,000 ejemplares es una cifra por demás milagrosamente estratosférica, en otros países como España el promedio de la buena comercialización de un best-seller corresponde mínimo a las 100,000 unidades…

2) los llamados best-seller no son considerados por muchos literatura seria, por lo que en términos globales para muchos “esa basura” no cuenta cuando se habla de novedades literarias (en este sentido opino personalmente que un best-seller es finalmente un libro, y por lo tanto cuenta como tal)…


Obviamente que los porcentajes en este bestializado país pueden variar un poco en términos de publicaciones recientes, pues no es lo mismo la participación por ventas que reciba un autor mexicano como el extraordinario debut de Omar Nieto (“Las mujeres matan mejor”, publicado por la expropiada y exlegendaria editorial Joaquin Mortiz), que el que se negocie para los libros que escribe el afamado estadounidense Dan Brown (“Infierno”, publicado por Planeta)…

Pero vayámonos a otros datos… si la información* difundida recientemente sobre los libros más vendidos de toda la historia es cierta, entonces tendríamos las siguientes (para algunos) terroríficas cifras:

- Harry Potter de J.K Rowling goza del tercer lugar con 400 millones de copias vendidas…
- El señor de los anillos de J.R.R Talkien ocupa el cuarto lugar con 103 millones…
- El código Da Vinci de Dan Brown tiene el sexto lugar con 57 millones…
- La saga crepúsculo de Stephenie Meyer obtiene el séptimo lugar con 43 millones…

El primer lugar?, la Biblia con 3.900 millones de ejemplares vendidos…

Ahora bien, en otro aspecto pero continuando con el tema, en materia de títulos publicados, nuestro adormilidado país en mi opinión se sigue quedando siempre atrás: por ejemplo, durante el año 2012 se publicaron un total de 60,219 libros en España, mientras que aquí la cifra quedó en los humillantes 26,635**…

Pero dejemos las vergüenzas mexicanas*** debajo de la alfombra y mejor cerremos con un dato anecdótico:

La UNESCO estableció en el año 2001 la selección anual de la “Capital Mundial del Libro”, a la ciudad que derivado de su esfuerzo por fomentar la lectura y por la calidad de la industria editorial, se lo merece...

La primera metrópoli latinoamericana en obtenerlo fue Bogotá en el año 2007… después fue Buenos Aires en 2011 la seleccionada… y a partir de ahí ninguna nominación ha regresado al continente… veamos:



mexiquito?, dudo que de aquí hasta el resto de la existencia de vida humana sobre la superficie del planeta, algún día ocupe algún día este honor… sin embargo, como decimos por acá, siempre tendremos un consuelo de pendejos: el 70% de los adultos en los Estados Unidos no han estado en una librería los últimos cinco años...

* Los datos aquí presentados fueron adecuados a partir de información obtenida en internet…

** Cifras no definitivas...

*** Más datos vergonzosos: el gobierno mexicano ha tenido que reconocer que los 238,3 millones de libros de texto gratuito que se distribuirán en sus 198,896 planteles de escuela primaria y secundaria, para el ciclo escolar que comenzó este mes de agosto de 2013, contienen 117 errores ortográficos...


Es lo malo de los libros (8)

21.
En aquella época el grupo mexicano de blues Real de Catorce estaba viviendo su mejor apogeo como proyecto musical independiente, antes de que se masificara y se convirtiera en un conjunto con cientos de miles de seguidores a lo largo de todo el país… habrá de reconocerlo: pese a que en su momento gozaron de gran fama que incluso alcanzó tintes internacionales, como banda nunca traicionaron los ideales con los que decidieron comenzar a tocar su música…

Cierto sábado en la noche estábamos mi amiga T (directora de cine y escritora) y yo tomándonos unas cervezas cerca del Foro Cultural Alicia, donde precisamente se presentaría Real de Catorce, en espera de que la horas se hicieran menos largas y mientras tocaban las dos bandas teloneras… y en esa cantina, sin más, hicieron su aparición los cuatro integrantes del grupo, quienes al reconocernos (principalmente a T, vieja conocida de ellos), tomaron unas sillas y se sentaron con nosotros…

Según mis cálculos faltaban poco más de una hora para que llegara su turno, así que ahí estaban José Cruz (cantante), Rafael Ochoa (bajista), José Iglesias (guitarrista) y Fernando Abrego (baterista), conviviendo con nosotros y sin haberlo planeado ninguno de los seis presentes…

Tampoco es que fuera novedad: yo ya los conocía a todos e incluso en otras ocasiones me había tomado unos tragos con alguno de ellos, aunque en realidad nunca con todos juntos… y sin embargo no por ello podía presumir que fuéramos grandes amigos…

El lugar donde estábamos era pequeño pero agradable: se le podría llamar cantina, aunque en realidad se trataba un acogedor bar (cuya fama y por la colonia en que se encuentra ubicado, forma ya parte de varios libros en los que los aferrados compilan lo que se ha mal llamado “cultura popular urbana”), y cuyo dueño era un hombre ya mayor, vestido eterna y pulcramente de traje y corbata, que no se despegaba de la caja registradora… contaba con algunas mesas en donde cabían cómodamente 4 personas, pero lo más atractivo era su espaciosa barra de madera finamente labrada, desde la cual se podían observar todas las botellas de los más variados licores con los que se embriagaban los asiduos visitantes… el detalle que más me agradaba era que la iluminación era por demás tenue, lo que le daba cierto aire de intimidad al ambiente…

A mi lado derecho se sentó José Iglesias (uno de los mejores guitarristas de blues que ha tenido México y que posteriormente moriría de manera temprana, ya alejado de Real de Catorce, no por el cáncer contra el que luchaba desde hacía largo tiempo, sino de un inesperado infarto)… en el extremo izquierdo estaba T y frente a nosotros se acomodaron los demás músicos… de inmediato pidió cada quien su respectiva bebida e iniciamos una agradable conversación…

José Iglesias tomó el libro que yo había dejado sobre la mesa (como siempre: para que no lo fuera a olvidar o se me extraviara en algún descuido) y leyó en voz alta el nombre del autor y el título: “Justo Esteban Estevanell… Santiago: 39 grados sobre 0” y que era una edición bastante rústica, como todas las que publican las editoriales cubanas, que anteponen la calidad del contenido al de la presentación… pasó sus páginas con relativo interés…

Intrigado José Cruz, de todos sabido un lector empedernido (en aquel entonces ya rondaba por su cabeza terminar su primer libro de poesía que extrañamente aún tardó muchos años en decidirse a publicar), se lo pidió, comenzó a hojearlo primero y finalmente se concentró en leerlo olvidándose de todos los que estábamos ahí presentes…

Entre los demás intercambiamos algunas opiniones sobre la situación de la escena cultural independiente en el Distrito Federal, sobre la cual todos se mostraron bastante optimistas… en algún momento la aguerrida mánager del grupo (tenía una fama de feroz cuando se trataba principalmente de tocar temas relacionados con dinero), hizo su aparición y sin más les soltó un escueto “en 10 minutos” y desapareció…

El cantante colocó el libro sobre la mesa con delicadeza, mismo que a su vez Rafael tomó para examinarlo y al tiempo que T decía haciendo alusión a mi persona: “cada uno debería de ponerle en ese libro una dedicatoria para mi amigo”…

  
José Cruz me volteó a ver entre sorprendido y conteniendo algo parecido a una indignación, esperando que yo hiciera algún comentario sobre el ultraje que estaba a punto de cometerse contra la integridad del texto… ella agregó para tratar de justificar su sugerencia: “es un gran admirador de ustedes”… también Fernando volteó a verme con curiosidad…

Rafael dijo “lo sabemos – exageró - siempre lo vemos en nuestros conciertos”… yo agregué, por decir algo: “sí, tengo todos sus discos… cada uno con sus respectivas dedicatorias”, y sin avisar José Iglesias tomó el libro, sacó una pluma y escribió algo, sin fijarse al igual que los demás, en la segunda página… Fernando hizo lo mismo que Rafael…

Finalmente José Cruz redactó lo suyo, me lo regresó, le dio un beso a T y se despidió de mi con un movimiento de cabeza (seguiría indignado del agravio al libro por las dedicatorias?)… Rafael, el otro José y Fernando (quien de paso colocó un billete sobre la mesa), hicieron lo mismo con T, a mi me estrecharon la mano y se encaminaron a dar su recital…

T y yo nos quedamos en silencio mientras ella tomaba mi libro, veía la fotografía de Justo Esteban Estevanell en la contraportada y posteriormente dio inicio a la lectura de las dedicatorias… en algún momento me volteó a ver mientras abría exageradamente los ojos y tras dudar un poco, se animó a cuestionarme:

- estos que se acaban de ir son cuatro y escribieron con tinta negra, pero acá en tu libro, en la primera hoja, tienes otras dos dedicatorias escritas en inglés y en color azul… de quién son?... acaso conoces al autor del libro?... el cubano te hizo una dedicatoria en inglés?
- no… bueno… – dudé un poco ante tantas preguntas – esa dedicatoria de letras grandes me la escribió Jimmy Cliff…
- qué dices??!!! – exclamó sorprendida y saltando sobre su asiento – estuviste con Jimmy Cliff?
- pues… sí - acepté…
- cómo?... cuándo?!!!
- platiqué un rato con él – le confié – después de su concierto – aunque no le conté sobre el contexto de mi depresivo y suicida estado de ánimo que me llevó a dicho evento y por lo cual, como ha sucedido varias veces en mi vida, salvé la vida…
- eres un cabrón lleno de suerte: mi amigo Javier trató de hacerle una entrevista para el periódico La Jornada y simplemente no pudo…
- pues… no sé: antes de que terminara su presentación me encontré con Iván, que está tocando con la banda de reggae Rastrillos y comenzamos a platicar mientras caminábamos hacia al escenario… y nos seguimos hasta la parte de atrás: nadie del personal de vigilancia nos detuvo… Jimmy Cliff terminó de tocar y al bajar por las escaleras nos cruzamos, me saludó de mano y sin más me preguntó si me había gustado… así empezó la plática…
- y la otra dedicatoria? – me inquirió T…
- de una de sus coristas – dije entre risas – una bellísima negra que me dejó con la boca abierta por su hermosura…
- cabrón – repitió a manera de queja feminista mientras releía la sencilla dedicatoria del músico - Jimmy Cliff!!!! carajo: el único digno sucesor que ha tenido Bob Marley!!!

T me regresó el libro sin que yo hiciera nada por revisar las dedicatorias de los integrantes de Real de Catorce… pedimos más cervezas y ninguno de los dos propuso ir a presenciar el concierto… por el contrario, mi amiga, tras un par de minutos de extraño silencio, me encaró y en algo cercano a una exigencia me dijo:


- cuéntame de qué conversaste con Jimmy Cliff…

Blue Coupe: los exBlue Oyster Cult van seguros

1.
Mucha gente piensa que la historia de Blue Oyster Cult debería haber caminado por otro sendero: el del éxito masivo… y si bien todo parecía destinado a ello por la creatividad plasmada en sus primeros discos, tras la primera baja en su formación original, en este caso la del baterista Albert Bouchard, se desencadenó una serie de entradas y salidas de músicos que si bien permitieron mantener durante algún tiempo la calidad musical de las subsiguientes grabaciones, con el paso de los años sí afecto su fuerza interpretativa como grupo…

Blue Oyster Cult como grupo de hard rock alcanzó casi el nivel de leyenda, vendieron más de 25 millones de discos alrededor del mundo y quizá lo mejor, a diferencia del regocijo que provoca la fama, se ganaron un merecido status de banda de culto que se mantiene aún hoy en día…

A partir de 1981 con la primera deserción, la entrada y salida de bateristas, tecladistas y bajistas fue una constante que dio origen a una serie de propuestas musicales paralelas que en su conjunto no trascendieron en términos de éxito comercial, aunque cada una de ellas tiene sus momentos rescatables… irónicamente hasta la fecha sigue la inestabilidad de sus integrantes (quedando como núcleo alrededor del cual gira el nombre), en los fundadores Buck Dharma y Eric Bloom…


2.
Una de las propuestas paralelas al nombre de Blue Oyster Cult es precisamente Blue Coupe…

3.
Los orígenes de Blue Coupe se remontan al año de 2006, concretamente al disco de Dennis Dunaway Project llamado “Bones From The Yard” (por cierto grabación muy recomendable), y en el que el bajista de Alice Cooper se hacía acompañar por el guitarrista Rick Tedesco, el baterista Russ Wilson y el tecladista Ed Burns, teniendo a su vez a músicos invitados de la talla Ian Hunter y obviamente de Joe Bouchard… dicho proyecto, proyecto que al finalizar su promoción, dio pie a que en 2008 iniciaran pequeñas giras después de incorporar a Albert Bouchard en sus filas, interpretando únicamente temas de sus respectivas bandas de origen: Blue Oyster Cult y Alice Cooper…

Aunque fue hasta 2010 que Blue Coupe publicó su primera grabación con material totalmente original, el ya citada “Tornado on the Tracks”, mismo que obtuvo críticas favorables en la prensa especializada…

4.
Hace menos de dos meses comentaba en este blog sobre el disco debut de Blue Coupe titulado “Tornado on the Tracks”, grupo compuesto por los ex integrantes de Blue Oyster Cut y Alice Cooper: Albert Bouchard en la batería - coros, Joe Bouchard en la guitarra / teclados / voz y Dennis Dunaway en el bajo / coros…

También informaba que la banda ya estaba grabando su nuevo disco, titulado tentativamente de “Million Miles More” (situación bastante extraña porque las compañías discográficas ningunean a cada hora, y con mayor cinismo, la inversión para sacar nuevas producciones discográficas), y de pronto se hace realidad dicho anuncio: Blue Coupe tiene ya circulando el citado segundo álbum, ratificando el título de “Million Miles More”…

Lo más impresionante es que en este segundo disco Blue Coupe no desilusiona, sino por el contrario: consolida un sonido que ya se dibujaba en su primera grabación, y que sin repetirse ni quedarse cómodamente en la efectiva fórmula de su primer album, esta vez continúan ampliando sus sonoridades, acercándose más al hard rock en su variante ruda (pero sin llegar a la peste metálica), pero manteniendo esos retoques de finura, cuando son necesarios, para mantener su calidad musical…

Por si fuera poco la banda nuevamente cuenta con importantes invitados, y a diferencia del primer disco, esta vez la lista es más amplia y ayuda a Blue Coupe a alcanzar las metas evolutivas que se plantearon para esta segunda placa… denle un vistazo a los colaboradores:

Ross the Boss (guitarrista de Manowar) en el tema Ain’t Dead…
Buck Dharma (guitarrista de Blue Öyster Cult) en la canción Hellfire Hurry…
Deniz Tek (Radio Birdman) pone su voz Supernatural Love…
Giles Robson (harmónica) hace lo propio en Used Car…
Goldy McJohn (tecladista de Steppenwolf y Janis Joplin) en la pieza Modern Love (Stalking Time)…
y por supuesto Alice Cooper pone la voz en Hallow’s Grave…


5.
Piezas destacables? podría decirse que “Million Miles More” es un disco de hard rock bueno de principio a fin… parejo, pero habrá quien tenga sus preferidas de acuerdo a sus muy personales gustos musicales…

En general se nota mayor detalle en algunos de los arreglos de ciertas piezas de hard rock como Hallow’s Grave, More Cowbell (Gotta Fever) y Ain't Dead… la inclusión de temas más relajados que no por ello dejan de ser poderosos como Everybody Goes Insane y Used Car… las canciones dramáticas como Train of Thought y I'll Forever Stick Around… la abiertamente rockera como Modern Love (Stalking Time)… y al igual que en el disco anterior, cortes de excelente factura pero con la clara intención de buscar su espacio en las estaciones de radio FM como Supernatural Love…

En general Blue Coupe nos entrega en su segundo disco “Million Miles More” 13 temas de excelente manufactura, tanto en las letras como en la composición y la ejecución instrumental (quizá se la producción de los experimentados Jack Douglas y Warren Huart), con lo que nos dejan en claro que nos seguirán dando agradables sorpresas en el futuro…